Durante el 2022, los ingresos de los hombres se incrementaron casi tres veces más que el de las mujeres y el empleo formal benefició más a los varones.
Uno de los grandes problemas del mercado laboral peruano es que todavía mantiene severas brechas de género. La disparidad de las condiciones y oportunidades se evidencian al revisar información del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) que revela que durante el 2022 los ingresos de los hombres crecieron tres veces más en comparación a las mujeres. Las cifras del INEI indican que a finales del año pasado los ingresos de los hombres aumentaron en 9,7% (S/157.80) y el de las mujeres en 3,7% (S/44.60).
“Si bien las mujeres peruanas han tenido avances importantes en lograr la igualdad con los hombres en el acceso a derechos básicos como la salud y la educación, todavía están relegadas cuando se trata de sus ingresos. Siguen enfrentando muchos obstáculos que les impiden realizar su pleno potencial económico. Esto no sólo inhibe a las mujeres, además frena el rendimiento económico y el crecimiento del país”, comentó Natalia Cuglievan, Líder de Colocación Laboral y Empleabilidad de Zegel IPAE.
No solo los ingresos de las mujeres son menores frente al de los hombres, también son menos la falta de oportunidades que tienen para acceder a un empleo formal. Según el INEI, durante el 2022, el empleo formal creció 4,1% (62 mil) en las mujeres, mientras que en los hombres en 9,3% (211 mil personas). Por otro lado, el empleo informal femenino creció 12% (494 mil), mientras que en los hombres 5,6% (279 mil). En cuanto al desempleo, el 8,2% de las mujeres del área urbana que desean y necesitan trabajar no lo pueden hacer, a pesar de estar buscando activamente trabajo.
“Un periodo largo de desempleo lleva a una disminución en la autoestima de las desempleadas, y puede traducirse en una aceptación de sueldos muy bajos en puestos muy precarios, lo que hace continuar con el círculo de pobreza de estos hogares”, advirtió Cuglievan.
Educación es clave para la igualdad
De acuerdo con el documento “Brechas de género 2022: avances hacía la igualdad de mujeres y hombres” del INEI, las mujeres que estudiaron una profesión técnica tienen ingresos equivalentes al 80% de lo que perciben los hombres; mientras que las que se dedican al comercio sus ingresos son de apenas 61% de los varones. De acuerdo al estudio, las ramas de actividad económica en las que se concentran el 89,6% de las mujeres peruanas son servicios (36,4%), comercio (27,5%) y agricultura (25,7%). Por otro lado, el 8,1% de las mujeres trabajan en el sector manufactura.
“Se ha determinado que, en términos educativos, las mujeres -principalmente las jóvenes- están ahora más preparadas que sus pares masculinos, pero eso no se refleja en sus ingresos. El motivo es que la mayoría de ellas opta por estudiar carreras menos rentables como educación, humanidades, servicio social, etc., ya sea porque algunas carreras son consideradas más masculinas o porque optan por priorizar su vida familiar”, puntualizó Natalia Cuglievan.